Lenguaje visual en fotografía
Vamos a hablar un poco de lenguaje visual, o cómo podemos interpretar la fotografía como una forma de comunicación.
Lenguaje visual
Seguiremos con la analogía de cocinar.
Cuando cocinamos para nosotros mismos buscamos hacer los platos que nos gustan y de la forma que nos gustan.
Quizás no prestamos tanta atención a la presentación (o sí). Pero digamos que sería un ‘yo me lo guiso, yo me lo como…‘
Cuando cocinamos para otras personas, por ejemplo en una reunión familiar, la cosa cambia un poco.
Tenemos que pensar el menú, algo que les guste a todos. Probablemente también cuidaremos más toda la parte de presentación. Queremos que todos se sientan a gusto y disfruten de lo que hemos preparado. Que su experiencia sea agradable.
También está la parte del ego lógicamente. A todos nos gusta que valoren nuestro esfuerzo.
Volviendo a la fotografía, sería un poco similar.
Si hacemos fotos para nosotros mismos: para tener recuerdos de los eventos, de los viajes, fotos de la familia… Ahí lo importante suele ser el contenido en sí. El momento y los protagonistas.
La composición, la parte estética digamos, es un plus.
Para mí, lo importante es que como aficionados nos gusten las fotos que hacemos nosotros mismos. Por el contenido, pero también por la presentación de ese contenido.
Si hacemos fotos para publicar tenemos que pensar en cierta forma en los destinatarios de esas fotos.
Aquí ya entraría lo que sería el lenguaje visual, como parte de una forma de comunicación.
Fotografía como forma de comunicación
Como en toda comunicación hay un emisor (nosotros como autor de la foto), hay un mensaje o información que queremos transmitir, hay un canal de comunicación (la imagen en sí) que utiliza un determinado lenguaje (código) y hay un receptor (la persona que ve la foto).
Para que la comunicación funcione plenamente: tanto el emisor como el receptor tienen que tener unos códigos comunes, un lenguaje en el que se puedan entender.
Y también es muy muy importante el contexto.
En el caso de una foto, el contexto puede ser el título, alguna descripción en texto que acompaña la foto, si pertenece a una determinada colección temática, el contexto histórico, social, etc.
Si el lenguaje que utiliza el autor es muy exclusivo o muy complejo, sólo los que conozcan esos códigos y/o el contexto podrán tener acceso al mensaje.
Por ejemplo, muchos cuadros (arte abstracto por ejemplo) no se pueden apreciar y disfrutar si no se tienen esos códigos ‘secretos’: la intención del autor o la interpretación del contenido, etc.
¿Hay un lenguaje visual universal?
Podríamos decir que hay un lenguaje visual más o menos universal.
Este lenguaje se basa sobre todo en el comportamiento de la percepción visual humana, que de alguna forma nos da un código común (en el sentido estadístico, porque hay que tener en cuenta que la percepción de cada persona ante un mismo estímulo puede ser diferente)
Sobre este lenguaje básico (que para mí es el más interesante) hay lenguajes más elaborados, que se basan ya en simbolismos o reglas aprendidas.
Estos lenguajes visuales no son universales, dependen de aspectos culturales y de la experiencia vital del emisor y del receptor.
Una foto que utilice unos códigos muy exclusivos sólo va a ser entendida completamente por alguien que entienda esos mismos códigos.
Una misma imagen puede contener diferentes mensajes, o diferentes niveles o capas si lo queremos ver así.
Habrá personas que sólo recibirán una parte del mensaje porque les falta ese ‘código común’ necesario para descifrar toda la información.
Y también hay que contar con que la percepción visual está muy influenciada por factores externos: condicionamiento, ideas preconcebidas, estado de ánimo, experiencia vital, expectativas…
Componentes del lenguaje visual
Por resumirlo de una forma muy sencilla, el lenguaje visual estaría formado por elementos básicos (las formas) estructurados por la composición.
Esas ‘formas’ pueden ser objetos reconocibles o formas básicas abstractas (punto, línea, triángulo, círculo…)
La visión humana tiene una facilidad enorme para encontrar ese tipo de patrones geométricos o de abstraer formas básicas a partir de una imagen más compleja.
Se suele decir que el lenguaje visual está basado en una codificación débil.
Esto quiere decir que aunque podemos partir de esos componentes básicos y algunas relaciones más o menos universales, las combinaciones son prácticamente infinitas y cambios sutiles en los componentes, en la composición, en el contexto, etc. pueden alterar bastante el mensaje y el resultado final.
Por eso es muy difícil generalizar y simplificar algo tan complejo.
Es prácticamente imposible resumir el comportamiento de la percepción visual en una serie de reglas básicas de composición.
Antes de que salgas corriendo…
Vuelvo a insistir en que no hay que tomar esto como algo filosófico, inútil o increíblemente complejo.
Todos aprendemos a hablar uno o varios idiomas.
Para comunicarme con alguien que más o menos hable el mismo idioma no tengo que ser catedrático de la Lengua.
Sin embargo, una persona que conoce bien el idioma puede aprovecharlo para comunicar mejor: de una forma más precisa, o más convincente, o para generar ciertas emociones, o sensaciones… La misma historia se puede narrar de muchas formas diferentes.
En fotografía ocurre lo mismo.
Cuanto más conozca sobre el lenguaje visual más recursos voy a tener a mi disposición para hacer llegar a otras personas el mensaje que quiero transmitir con la imagen.
Y tampoco quiero que te quedes con la idea de que cada foto tiene que incluir un mensaje transcendental.
El mensaje puede ser tan simple como: mira qué sitio tan chulo, este es mi perro corriendo por el parque…
Pero piensa por ejemplo en un fotógrafo publicitario: Tiene que conseguir transmitir el mensaje de que el producto es increíblemente bonito, atractivo, genial… y que te lo tienes que comprar para ser feliz. Y ese mensaje tiene que llegar a muchísimas personas (posiblemente de diferentes culturas y con experiencias vitales totalmente distintas) y a través de una única imagen a la que se prestará atención durante unos pocos segundos.