Composición: figura y fondo en fotografía

Vamos a hablar sobre los conceptos de figura y fondo, pero en este caso aplicados a la fotografía. Cómo afectan y cómo podemos aprovechar ese efecto como creadores.

Para entender este artículo es importante que hayas visto previamente el de figura y fondo desde el punto de vista de la percepción visual humana .

Figura y fondo en fotografía

Resumen de conceptos clave (percepción visual):

  • La visión humana se basa en un mecanismo de reconocimiento de patrones
  • No necesitamos analizar las partes y los detalles de un objeto para reconocerlo
  • El objeto ‘emerge’ directamente como concepto en nuestro cerebro: coche, persona, perro… a partir de su forma, sin necesidad de tener que analizar sus detalles y sus componentes.
  • La visión está constantemente seleccionando elementos de interés en los que centrar la atención
  • Cuando centramos la atención en algo, ese algo se convierte en ‘figura’ y todo lo demás se convierte en fondo, y pasa a un segundo plano en nuestro cerebro (visión periférica)
  • La percepción de la realidad es siempre una interpretación (entre muchas posibles) que hace nuestro cerebro a partir de la información incompleta que le proporcionan los sentidos

Figura y fondo en artes visuales

Los conceptos de figura y fondo que se utilizan en pintura, fotografía y las demás artes visuales tienen un origen histórico muy anterior al de los conceptos de figura y fondo relacionados con la percepción visual.

Figura y fondo desde el punto de vista del autor de la obra

En artes visuales (pintura sobre todo) la figura es el protagonista que queremos destacar en esa imagen.

Es decir, como creadores de la obra, la figura es algo que ya hemos decidido de antemano.

Y el fondo sería todo lo que rodea al protagonista, para crear un contexto o para reforzar su presencia, etc.

Figura y fondo en fotografía: elegir la figura y el fondo

En fotografía se suele hablar más bien de protagonista, no se suele utilizar el término ‘figura’.

También en fotografía, solemos llamar fondo a lo que está lejos, o al menos por detrás del elemento principal (el horizonte, las montañas que aparecen a lo lejos…)

Figura y fondo desde el punto de vista del observador de la obra

Ahora lo vamos a ver desde el punto de vista del observador.

Desde el punto de vista del observador de la obra (pintura, fotografía..) se aplicarían los mecanismos de percepción visual.

Los ojos, la visión, hacen un barrido de la imagen, deteniéndose (fase de fijación) en aquellos elementos que más llaman su atención.

La figura va cambiando cada vez que el cerebro centra su atención en un elemento diferente.

Por ejemplo, cuando el observador se fija en el protagonista del cuadro, ese protagonista será para él la figura y coincidirá con la Figura que eligió el autor.

Pero cuando el observador se fija en cualquier otro elemento (por ejemplo en una nube concreta o en el horizonte, etc.) ese elemento de lo que consideraríamos ‘fondo artístico’ se convierte en figura para el observador en ese instante.

Y el protagonista elegido por el autor pasa a ser fondo, deja de ser figura.

Recuerda que esto forma parte de un ciclo constante de barrido / fijación y cada fase de ese ciclo dura poquísimo, décimas de segundo.

Si hay un protagonista muy claro o un elemento que llama mucho la atención, ese elemento recibirá muchas ‘visitas’, los ojos volverán a él una y otra vez, y además la fase de fijación tendrá una duración un poco mayor.

Si por el motivo que sea pasamos a un estado de atención consciente (por ejemplo, pensar de forma consciente: me voy a fijar en esa nube en concreto), podríamos mantener la atención en un determinado elemento durante más tiempo (una especie de fase de fijación prolongada). Pero por hacer una analogía, sería como cuando controlamos la respiración. Requiere pasar a un estado de concentración (otro tipo de atención) e implica un esfuerzo.

La intención del autor

Muchas veces el autor busca que su protagonista sea El Protagonista indiscutible, La Figura.

Es decir, quiere que el observador centre su atención en ese protagonista y no en cualquier otro elemento de la obra..

Por ejemplo, si estamos haciendo una foto de producto para una campaña publicitaria, sería interesante que el usuario final se fijara sobre todo en el producto (marca, modelo o algo que pueda recordar que lo relacione con ese producto y sus bondades)

El fondo en esos casos estaría de relleno, por decirlo de alguna forma. Si conseguimos que el fondo potencie de alguna forma al protagonista, perfecto.

Pero como mínimo interesaría que no reste protagonismo o distraiga al observador.

Por su parte, el observador no está obligado a nada.

Contemplará la obra o la foto a su manera y centrará su atención en lo que le llame realmente la atención en ese momento.

Figura y fondo en fotografía: relación entre la figura y el fondo

Cada persona se verá atraída por diferentes elementos y una misma persona en diferentes situaciones y/o momentos tendrá un comportamiento distinto.

Imagina que estamos haciendo una campaña para publicitar un reloj de pulsera.

Elegimos al modelo, elegimos un parque precioso para nuestras fotos y hacemos una foto memorable.

Pero resulta que justo detrás del modelo había un Ferrari rojo que aparece en el encuadre.

Habrá observadores que centrarán su atención en el reloj, pero otros centrarán su atención en la cara del modelo por ejemplo. Y otros fijarán su atención en el Ferrari.

Y eso no es lo que quería el fotógrafo o el que le paga al fotógrafo…

Sin embargo el autor puede intentar ‘manipular’ la atención del observador, utilizando algunos de esos mecanismos de la percepción visual que iremos viendo.

En el ejemplo anterior podría ser tan sencillo como elegir un encuadre muy cerrado con un primer plano del reloj, para que no haya elementos distractivos que compitan por el protagonismo.

En otros casos puede buscar algún tipo de relación entre los elementos del encuadre para dirigir la mirada del observador hacia el protagonista principal o para transmitir un mensaje más elaborado.

Relación figura fondo en fotografía

Para hablar de la relación figura-fondo nos vamos a centrar en las situaciones en las que nos encontramos con dos elementos muy diferenciados: una única figura (un protagonista) y un fondo (el entorno y sus propios elementos)

En esas situaciones se establecen unas relaciones muy directas entre la figura y el fondo (cuando hay varios protagonistas principales las relaciones son más complejas).

NOTA: Cuando hablamos de una única figura nos referimos a un elemento visual, que no siempre coincide con un único objeto físico. Por ejemplo, una figura puede ser una pareja a la que estamos haciendo un retrato, o un grupo de amigos, o un pueblo (conjunto de casas) rodeado por su entorno natural…

¿Qué características puede tener esta relación figura-fondo?

Contraste vs fusión

En una relación de contraste el elemento principal tiene una forma, un tono (valor: claro / oscuro), un color, una textura, enfocado vs desenfocado… que hacen que destaque mucho con respecto al fondo

Una relación de fusión sería en cierta forma lo opuesto al contraste. El elemento principal y el fondo comparten algunas propiedades: color, tono… Esto hace que aunque lo podemos distinguir del fondo, no hay una separación tan clara.

Recuerda que esto no es bueno ni malo, simplemente significa que aparece una relación diferente entre figura y fondo.

Complejidad vs simplicidad

Se pueden dar todas las combinaciones posibles de complejidad y simplicidad de figura y fondo.

  • Fondo simple y figura compleja
    Es la relación más común porque es en la que el protagonista contrasta perfectamente con la sencillez del fondo. El fondo aporta poca información.
  • Fondo complejo y figura simple
    Es una relación más difícil de crear porque requiere de cierta abstracción.
    Un ejemplo podría ser una fotografía con una sombra o una silueta como protagonista, sobre un fondo con una textura mucho más compleja.
  • Fondo simple y figura simple
    También se suele utilizar para crear algún tipo de abstracción, por ejemplo si se busca el minimalismo o cuando se utiliza el espacio negativo.
  • Fondo complejo y figura compleja
    El ejemplo típico sería una foto totalmente improvisada de una escena en la que no tenemos control sobre los protagonistas ni sobre el fondo, ni hemos elegido un encuadre que nos ayude a simplificar.
    En general en este tipo de fotografías la relación figura fondo es muy compleja, con múltiples elementos que distraen y luchan entre sí por la atención del observador.

Contexto

Otro tipo de relación tiene que ver con la información que aporta el fondo y si esa información es relevante o no (para el mensaje que queremos transmitir)

Un fondo puede añadir contexto.

Por ejemplo, si hacemos una foto de una persona y al fondo aparece la torre Eiffel, ese fondo está aportando información adicional al observador: esa persona está en París.

El fondo contribuye en ese caso a la narrativa, al mensaje.

Por otro lado, el fondo puede añadir información que no tiene nada que ver con la figura o que no aporta nada al mensaje (aporta ‘ruido’, en el sentido de información no útil).

En ese caso podríamos decir que el fondo compite con la figura principal por el protagonismo. Es decir, es una fuente de distracción y más que sumar está ‘restando’. Está aportando una complejidad adicional al conjunto.

Y otra opción sería buscar un fondo que sólo aporte un valor estético: por ejemplo los fondos desenfocados, los fondos simples (relación fondo simple / figura compleja), con colores difusos, con poca textura…

¿Siempre hay un fondo?

No.

Me refiero al fondo desde el punto de vista de las artes visuales, entendido como lo que rodea a la figura principal que hemos elegido como autor de la obra.

Aquí podríamos entrar en sutilezas e interpretaciones subjetivas, pero hay composiciones en las que no existe un fondo como tal.

Por ejemplo, si hacemos un retrato de una persona y llenamos todo el encuadre con su cara (primerísimo primer plano), ahí no habría fondo, es todo figura.

En una fotografía de paisaje que no tenga un elemento muy destacado, todo lo que aparece en el encuadre puede ser perfectamente la figura, no hay un fondo como tal.

Incluso en fotografía de paisaje en la que aparecen varios planos bien definidos: primer plano, plano medio y fondo… Ese ‘fondo’ (entendido aquí como lo que está más lejos) a veces es realmente la figura principal, el elemento de mayor interés. Y muchas veces todos los planos tienen una importancia similar, no podríamos decir qué es ahí figura y qué es fondo.

¿Qué atrae más nuestra atención?

Cuando vemos una imagen (o una escena del mundo real) el cerebro sigue una serie de algoritmos que buscan los puntos o las zonas de interés.

Algunos de estos ‘atractores visuales’ son:

  • Las zonas claras, iluminadas, atraen más la atención que las oscuras.
  • Los elementos enfocados llaman inmediatamente la atención con respecto a los que aparecen desenfocados.
  • A igualdad de condiciones, un objeto cercano atrae más la atención que uno lejano.
  • En nuestra experiencia diaria, los objetos cercanos suelen estar en la parte inferior de nuestro campo de visión, mientras que los objetos más lejanos están en la parte superior.
  • Un elemento con un color diferente y que contrasta con el resto llama más la atención.
  • A igualdad de condiciones, un elemento de colores cálidos (naranjas y sobre todo rojos) llama más la atención.
  • Un elemento aislado llama más la atención que un grupo de elementos
  • Un elemento grande con respecto a uno pequeño
  • Un elemento con textura con respecto a otros que son más homogéneos
  • La forma humana llama la atención (p.e. una persona, aunque aparezca muy pequeña en mitad de un paisaje)
  • Un elemento de color (saturado) en un entorno de grises o colores más apagados.
  • Formas reconocibles: objetos que pueden reconocerse fácilmente con respecto a un fondo.
    Por ejemplo una pelota con respecto a un suelo cubierto por hierba.
  • Formas abstractas que surgen a partir de la relación entre elementos de la escena: líneas, formas geométricas, patrones repetitivos,

Ya los veremos con más detalle y muchos de esos criterios están relacionados con principios específicos descritos por la teoría de la Gestalt.

¿Cuales de esos criterios tienen prioridad?

Esta sería la pregunta del millón.

Y no sé la respuesta.

Hay estímulos o criterios muy claros, por ejemplo un elemento rojo sobre un fondo neutro, es un atractor muy fuerte.

Pero el cerebro de cada persona funciona ligeramente diferente. Y además somos muy influenciables: el estado de ánimo influye, si estamos condicionados por algo, ideas preconcebidas, el contexto que rodea a la imagen…

Es muy complejo.

En una imagen con muchos estímulos repartidos por muchas zonas diría que es imposible saber a qué elementos va a prestar atención cada persona.

En todo caso sería un comportamiento estadístico.

Además, una imagen con muchos estímulos diferentes puede resultar agotadora si no hay una cierta relación visual entre los elementos.

Es muy difícil conseguir una imagen compleja que capte el interés y que haga que el observador mantenga su atención.

Al cerebro le supone un esfuerzo analizar la complejidad, si de primeras no se siente atraído por algo que tenga mucho impacto visual, no se va a molestar en analizar la imagen, de entrada la considerará poco atractiva.

¿Cómo reforzar el protagonismo de la figura?

Es decir, en esas situaciones en las que tenemos un protagonista muy claro…

¿Cómo podemos hacer para reforzar ese protagonismo?

Figura y fondo en fotografía: destacar la figura con respecto al fondo

Pues básicamente sería aprovechar esos ‘algoritmos’ o atractores visuales del cerebro que vimos en el apartado anterior:

  • Es más fácil si conseguimos encontrar la mayor simplicidad posible.
    En la composición en general y en el fondo en particular.
    La relación fondo simple + figura compleja suele funcionar siempre muy bien.
  • Podemos buscar un encuadre en el que el protagonista quede en primer plano
    En un plano cercano con respecto al fondo (elementos cercanos atraen más nuestra atención).
    El fondo quedaría en un plano más alejado.
  • Así, el protagonista puede aparecer con un tamaño grande.
    Con respecto a los demás elementos del fondo (elementos grandes con una forma definida atraen más nuestra atención que los pequeños)
  • El caso extremo sería un primer plano o un primerísimo primer plano.
    Llenamos el encuadre con la figura y el fondo desaparece literalmente.
  • Podemos intentar evitar elementos en el fondo que puedan distraer.
    Que se conviertan en protagonistas por sí mismos.
    A veces puede ser complicado encontrar esa relación fondo simple + figura compleja, pero al menos podemos intentar evitar que el fondo contenga atractores muy potentes.
  • Podemos intentar que el sujeto principal tenga unos tonos más claros que el fondo.
    Para establecer una relación de contraste (tonal)
  • O si el protagonista tiene tonos oscuros, podemos buscar el contraste tonal con un fondo claro
  • El protagonista debería estar perfectamente enfocado.
  • Si el fondo no tiene ningún interés y no aporta nada de contexto podríamos intentar que aparezca bastante desenfocado
    Ya veremos cómo hacerlo cuando hablemos de profundidad de campo.
    Este recurso es muy utilizado por ejemplo en fotografía de retrato, donde el principal protagonista es la persona.
  • Podemos buscar un contraste de color entre la figura y el fondo.

Figura y fondo en fotografía: destacar la figura con respecto al fondo

¿Hay que buscar todo eso en cada foto?

No, claro que no.

Recuerda que estamos hablando de situaciones en las que queremos dar mucho protagonismo a una figura.

Cada situación o cada escena puede tener muchísimas interpretaciones diferentes y podemos jugar con esas relaciones figura-fondo o con las relaciones entre varios protagonistas si no hay una única figura destacada.